El Clementinum de Praga (o Klementinum en checo) es una de las visitas imprescindibles en la ciudad. Gran parte de la culpa la tiene su magnífica biblioteca barroca, donde te sientes transportado en el tiempo.
Si además piensas en todos aquellos científicos, filósofos y otros personajes ilustres que trabajaron en ella, la sensación es única. ¿Te animas a recorrer el Clementinum con nosotros?
De antigua universidad a Biblioteca Nacional
En sus orígenes, el Clementinum era la sede de la Universidad de Carlos. Desde el siglo XVI fue ocupado por los jesuitas, que durante casi dos siglos estuvieron construyendo en la zona un gran complejo al que se fueron sumando territorios adyacentes.
Tras la expulsión de los jesuitas en el siglo XVIII, el Clementinum se convirtió en la sede de la Biblioteca Imperial y actualmente alberga la Biblioteca Nacional de Praga.
El interior del Clementinum
El Clementinum se divide en cinco patios en torno a los que se distribuyen el resto de estancias. Para visitarlo hay que apuntarse obligatoriamente a una de las visitas guiadas (en inglés o en checo), pues no puede verse por libre.
Estos son los puntos más interesantes de la visita:
- La Capilla de los Espejos es la primera sala que encontraremos en la visita al Clementinum. Una sala barroca forrada de espejos donde se encuentra el órgano que, se cuenta, tocó Mozart en su visita a Praga en el siglo XVIII.
- La Torre Astronómica, de casi 70 metros de altura: un observatorio astronómico que constituye un mirador único con vistas al Castillo de Praga.
- La Sala de los Meridianos, de camino a la Torre Astronómica. En ella se llevaba a cabo el que se ha convertido en unos de los registros meteorológicos más antiguos de Europa.
- La Biblioteca del Clementinum, que alberga más de 20.000 ejemplares, incluyendo una colección de viejos manuscritos. Se trata de un lugar único, con una atmósfera muy particular, donde podemos ver miles de libros rodeados de globos terráqueos, estanterías infinitas y los impresionantes frescos de Jan Hiebl en el techo.
- La Sala del Tesoro, la Iglesia de San Salvador y la Iglesia de San Clemente.
Asimismo, no olvides echar un vistazo a los quince relojes de sol adosados a las paredes de los patios, obra de uno de los mejores astrónomos jesuitas, Valentin Stansel.
Curiosidades sobre el Clementinum de Praga
- Es el mayor complejo arquitectónico de la ciudad, superado solo por el Castillo de Praga: el Clementinum ocupa una superficie de 20.000 metros cuadrados.
- Su nombre deriva de la capilla primitiva sobre la que se erigió el primer edificio del Clementinum, conocida como capilla de San Clemente. Hoy en día, el complejo cuenta con una renovada Iglesia de San Clemente.
- Actualmente, en el Clementinum también se celebran conciertos de música de cámara, concretamente en la Sala de los Espejos.
Te aconsejamos que reserves una hora en tu viaje a Praga para conocer el Clementinum, un lugar apasionante y poco conocido por los turistas que visitan la Ciudad Vieja.