La zona más moderna del casco histórico es Nove Mesto, la ciudad nueva de Praga. Pero no hay que dejarse engañar, pues la construcción de este barrio nos traslada hasta la Edad Media, al siglo XIV, cuando el emperador Carlos IV puso en marcha el que sería uno de los proyectos urbanísticos más importantes en la Europa del momento.
La vieja ciudad nueva
El rey Carlos pretendía hacer de Praga, a la que convirtió en capital de su imperio, una gran ciudad, para lo que impulsó este plan de desarrollo urbano con el objetivo de atraer más población y de convertir esta nueva zona en motor económico. Numerosos comerciantes y hombres de negocios se trasladaron a la Ciudad Nueva, y actualmente esta sigue siendo la parte de la ciudad donde se concentran la mayoría de las tiendas y oficinas.
Esta Ciudad Nueva se extendió alrededor de las murallas de la Ciudad Vieja, con tres ejes centrales conectados entre sí: el antiguo mercado de caballos, donde hoy en día se ubica la Plaza Wenceslao; el mercado ganadero, actual Plaza Carlos y el mercado de heno, hoy Plaza Senovážné.
La actual Nove Mesto debe su aspecto a las obras de remodelación que se llevaron a cabo durante el siglo XIX, dando origen a numerosos edificios de estilo art-nouveau.
Qué ver en la Ciudad Nueva de Praga
El barrio de Nove Mesto en Praga cuenta con varios lugares de interés:
- La Plaza de Wenceslao, una gran plaza rodeada de hoteles y restaurantes donde se ubica el Museo Nacional. Aquí tuvieron lugar importantes acontecimientos históricos, como la primera manifestación que dio origen a la Revolución de Terciopelo que derrocó al régimen comunista.
- La Ópera Estatal, al estilo de los teatros vieneses, que desde mediados del siglo XX es la principal ópera de la ciudad.
- El Museo Mucha, dedicado a uno de los mejores artistas checos. Se ubica dentro de un edificio del XVIII, el Palacio Kaunicky, donde se exponen numerosas obras, objetos personales y bocetos relacionados con el mayor representante del art-nouveau del país.
- El Museo Nacional, el más importante de Praga, cuyo edificio renacentista de grandes dimensiones alberga interesantes colecciones prehistóricas, zoológicas y antropológicas.
- La Casa Danzante, un curioso edificio deconstructivista diseñado por Frank Gehry en 1997 y que a pesar de su corta edad ya se ha convertido en todo un emblema de la ciudad.
- El Museo del Comunismo, sumamente interesante para todos aquellos que nos gusta la historia. A través de seis salas, nos acerca a la vida cotidiana en Praga durante el período de gobierno comunista entre 1948 y 1989.
- El Teatro Nacional, un precioso edificio neorrenacentista situado a orillas del Moldava.
- La Iglesia de San Cirilo y San Metodio, protagonista de uno de los episodios más sonados de la Segunda Guerra Mundial, cuando varios soldados contrarios al nazismo se atrincheraron en ella tras asesinar al gobernador nazi en la República Checa, Reinhard Heydrich. Fueron descubiertos por los alemanes y tras una férrea resistencia terminaron por suicidarse, pero aún pueden verse los restos de metralla en los muros de la iglesia. Hoy, la iglesia alberga un pequeño Museo de la Resistencia.
Cómo llegar a Nove Mesto
Lo más cómodo para llegar a la Ciudad Nueva de Praga es utilizar el metro:
- Metro: línea A (estación de Můstek – A) y líneas A y C (estación de Muzeum).